El caso versa sobre la obligación de la compañía Mutualidad de la Abogacía de abonar la pensión de viudedad a una mujer que había perdido su marido. La viuda era la segunda esposa del fallecido y para abonarle la pensión le exigían documentación relativa al primer matrimonio de su esposo. 

El cliente no tiene acceso a esos documentos y entiende que independientemente es documentación que se le debería requerir a la primera esposa. La cliente a su vez es abogada y ella misma también dirigirá escritos a la Mutualidad.

El abogado decide acudir a la vía extrajudicial para reclamar el pago de la pensión de viudedad. La viuda aporta el máximo de documentación posible a la solicitada, entre ellas una sentencia dónde aparece el nombre de la primera esposa de su difunto marido.